Mitos de la lactancia materna. Parte I

Mito #1: un niño que es amamantado no engorda

FALSO. Existe una falta creencia en la que si un niño no sube de peso se debe a la posibilidad de que la leche de la madre sea de baja calidad y no le esté brindando los nutrientes adecuados. Esta creencia es totalmente falsa. Es importante considerar que la alimentación de la madre es fundamental y debe basarse en verduras, frutas, cerales y muchas proteínas.

Mito #2: la lactancia materna ayuda en la prevención de enfermedades

CIERTO. La leche de la madre contiene anticuerpos que protegen a los bebés de bacterias y virus. También, es bien conocido que la leche materna ayuda a los lactantes a combatir infecciones y enfermedades. Según la Liga de la Leche Argentina, el 55% de las muertes de niños cada año producto de infecciones respiratorias y enfermedades diarreicas puede reducirse con la lactancia materna durante los primeros seis meses de vida.

Mito #3: existen problemas de lactancia con los implantes mamarios

FALSO. El hecho de la introducción de una prótesis en los senos de la madre no debe afectar el proceso de lactancia. Pero se debe hacer la salvedad de que, como todo cuerpo extraño en el cuerpo humano, este puede causar infecciones, por lo que a la mayoría de las mujeres sometidas a cirugía se les recomienda que, en caso de quedar embarazadas, y en el momento en que vayan a dar a luz, deben visitar a su cirujano plástico para descartar cualquier tipo de enfermedad o infección en sus mamas para así darle el tratamiento adecuado.