El embarazo después de los 35 años

Aunque una mujer mayor de 35 años puede tener un embarazo y un parto sin complicaciones, hay un aumento considerable del riesgo de sufrir problemas mientras esté esperando a su bebé. Esto sucede a causa de que los problemas que pueden presentarse en el embarazo aumentan progresivamente a medida que la mujer envejece.
 
¿Qué problemas pueden presentarse?
 
• Disminuye la fertilidad: A medida que la mujer envejece, le es más difícil quedar embarazada. Esto ocurre debido a que, a pesar de que la mujer sigue teniendo períodos menstruales, disminuye la calidad y la cantidad de óvulos cada mes. Por ello, los espermatozoides tienen menos probabilidades de fecundar el óvulo.
• Bloqueo de las trompas de Falopio: Esta condición es común en las mujeres mayores de 35 años. Se produce cuando una o ambas trompas de Falopio están bloqueadas a causa de daños, infecciones, adherencias o problemas de cicatrización de operaciones anteriores . Estos daños, bloqueos o cicatrices en las trompas de Falopio pueden evitar que se produzca la fecundación, debido a que los espermatozoides no pueden llegar al óvulo.
• La frecuencia en la que la pareja tenga relaciones sexuales también puede aumentar o disminuir las probabilidades de que la mujer quede embarazada, y aveces con la edad disminuye la frecuencia y el deseo sexual.

¿Qué problemas podría tener el bebé?

En caso de que la madre quede embarazada después de los 35 años, hay una serie de problemas que podría tener el bebé:

• Transtornos cromosomicos como el Síndrome de Down: Esta condición trae como consecuencia discapacidad intelectual y problemas cardíacos. Una mujer podría tener un bebé con síndrome de Down a cualquier edad, sin embargo, es más común en las mujeres embarazadas mayores de 35 años.
Aumenta el riesgo de aborto espontáneo
Aumenta el riesgo de muerte fetal
 
¿Qué pruebas se pueden realizar para detectar el síndrome de Down?
 
Pruebas invasivas
 
Hay dos pruebas prenatales que pueden detectar el síndrome de Down. Una de ellas es el muestreo de la vellosidad coriónica, en la cual se toma una muestra de biopsia de la placenta y puede determinar si el bebé padece de algún trastorno cromosómico. También está la amniocentesis, en la que se extrae una muestra de líquido amniótico para detectar si el bebé sufre de alguna condición como el síndrome de Down. Sin embargo, estas pruebas representan un riesgo, ya que son invasivas y aumentan el riesgo de que la madre sufra un aborto espontáneo.

Pruebas no invasivas

La prueba de detección de marcadores múltiples es un análisis de sangre que mide la cantidad de ciertas sustancias en la sangre de la madre (PAPPA, HCG serico, estriol no conjugado, alfafetoproteina serica, etc) y unido con la realizacion de un ecosonograma obstetrico genetico, puede determinar el riesgo de que un bebé nazca con síndrome de Down, anencefalia o espina bífida entre otras.

Alto riesgo obstetrico

Si una mujer es mayor de 35 años, es importante tener en cuenta que puede sufrir problemas de salud, tales como la presión arterial alta o diabetes, por lo que la madre requeriría de un cuidado especial durante el embarazo. No obstante, estos riesgos pueden disminuir considerablemente si la madre goza de una buena salud física.

¿Cuándo se debe llamar al médico?

Una mujer debe llamar a su médico si está intentando concebir y no logra quedar embarazada, sin importar la edad que tenga.