Ejercicios para combatir el dolor de espalda en el embarazo

Ejercicios para combatir el dolor de espalda en el embarazo

Los especialistas han determinado que hasta el 50% de las mujeres embarazadas presentan dolor de espalda en algún momento de su embarazo. No obstante, esto no quiere decir que usted deba resignarse al dolor, ya que hay muchas maneras de combatir este síntoma del embarazo de manera natural.

Es por esta razón que Embarazada.com te trae una serie de estrategias para que pueda vencer el dolor de espalda del embarazo.

¿Por qué ocurre el dolor de espalda?

En el embarazo, el dolor de espalda es el resultado de la conjunción de diversos factores. En primera instancia está el crecimiento del útero, lo que presupone un peso extra y no sólo eso, también un cambio en la postura. Asimismo, las hormonas del embarazo hacen que los ligamentos de las articulaciones se ablanden a modo de preparación para el parto, lo que provoca el dolor de espalda.

Si desea obtener más información sobre el dolor de espalda en el embarazo y qué lo causa, visite: /articulo/las-causas-del-dolor-de-espalda-en-el-embarazo

¿Cómo vencer el dolor de espalda?

El dolor de espalda no sólo puede ser aliviado mediante el ejercicio, sino también a través de la modificación de ciertos hábitos que atentan contra su espalda, como por ejemplo:

  • Duerma sobre un colchón firme
  • No utilice tacones
  • Si debe levantar algo del suelo, doble las rodillas mientras mantiene la espalda y el cuello erguidos
  • No utilice zapatos planos
  • No se incline hacia adelante
  • Coloque un cojín en la parte baja de su espalda cuando se sienta en una silla

¿Qué ejercicios hacer para aliviar el dolor de espalda?

Para aliviar el dolor de espalda recomendamos los siguientes ejercicios:

  • Coloque sus rodillas en el suelo de forma paralela y apóyese sobre sus manos con los brazos estirados. Deberá entonces curvar la espalda hasta que la barbilla casi toque su pecho. Luego, deberá realizar la posición contraria sin tensar exageradamente la espalda.
  • Colóquese de pie con la espalda recta y las rodillas ligeramente flexionadas, mientras que mantiene las piernas paralelas. Deberá colocar su pelvis hacia adelante, al mismo tiempo que aprieta los músculos de la parte inferior.